Quebrantada Y RedimidaEjemplo

Noemí - Pérdida y Soledad

Noemí era una mujer piadosa que sufrió la gran angustia de perder a su marido y a sus dos hijos. Aunque Noemí se describió a sí misma como amargada, desconocía que el plan de Dios para ella era mucho más grande que el suyo propio. El ejemplo de Noemí fue tan poderoso y significativo que Rut, su nuera, se entregó a seguir a su Dios. Noemí le presentaría a Rut a Booz, con quien se casaría y tendría un hijo que pertenecería al linaje de Jesucristo. Noemí, incluso en su dolor, se convirtió en un eslabón vital en el plan divino de redención y salvación del mundo.

¿En qué circunstancias estás experimentando dolor, amargura y angustia? Dios no nos promete una vida sin dolor, pero sí nos promete que cada dolor y cada pérdida son para Su propósito. Debemos estar dispuestas a rendir nuestros planes, nuestros deseos y nuestras expectativas a la voluntad de Dios, aun cuando no entendamos la razón.

Señor, Tú eres omnisciente, grandioso y todopoderoso. Tus pensamientos no son mis pensamientos, y Tus caminos no son mis caminos. Señor, ayúdame a confiar en Ti cuando me enfrente al dolor y a la desesperación. Ayúdame a recordar que Tus planes para mí son buenos. Ayúdame a soltar mis expectativas de cómo debería ir mi vida y entregar mis planes y mi agenda a los Tuyos. En el nombre de Jesús. Amén.