LA ETERNIDAD: Un Regalo de DIOSMuestra
DIOS NOS PREPARA PARA LA ETERNIDAD.
Una de las preguntas que nos hacemos en determinado momento, es el motivo por el cual Dios no nos lleva a su presencia cuando aceptamos a Cristo como Señor y Salvador.
Parte de la respuesta tiene relación con sus planes y propósitos para nuestra vida aquí en la tierra. Frederick Buechner nos dice al respecto: “La voluntad de Dios para mi vida se enfoca principalmente en la persona en la que Él quiere que yo me convierta. Él y yo tenemos toda la eternidad para trabajar en eso, así que nunca me lo he perdido, a menos que lo rechace”.
El pastor Rick Warren lo expresa de la siguiente forma: “La vida es un ensayo general; es el acto de calentamiento para el gran evento. Debes prepararte para la eternidad conociendo a Dios, pareciéndote más a Jesús y dejando que Dios te use para cumplir su propósito en la Tierra”. Max Lucado expresa este pensamiento así: “Cuando Dios te salvó, no solo te dio perdón por tu pasado, sino también autoridad en el presente y un papel en el futuro. Esta vida es un entrenamiento en el trabajo para la eternidad. Somos parte de la familia de Dios”.
En este contexto, nuestras luchas, los golpes, el dolor, la enfermedad, el “fracaso” y todas las decepciones que sufrimos en esta vida tienen su propósito en función de la próxima etapa de nuestro viaje.
Cuando entendemos que esta parte del viaje es una preparación para nuestra siguiente etapa, lo que nos acontece toma un significado diferente.
“Dios hace lo mismo con tus luchas. Él apila todas tus cargas: hambres, despidos, padres que se olvidaron de ti, jefes que te ignoraron; amargas rupturas, mala salud, días malos. Todos apilados, después observa cómo un lado de la balanza baja en picada. Ahora ve cuál es la respuesta de Dios. ¿Las quita todas? ¿Elimina las cargas? No; en lugar de quitarlas, las contrapesa: Él pone un eterno peso de gloria en el otro lado. Gozo sin fin; paz sin medida; una eternidad de Él. Observa lo que ocurre cuando Él pone eternidad en tu balanza". ¡Todo cambia! Las cargas se alzan. Lo pesado se vuelve ligero cuando es contrapesado por la eternidad. Si la vida es "solo un momento", ¿no podemos soportar cualquier desafío durante un momento?”, nos dice el poeta cristiano Max Lucado.
David Jeremiah lo resume de la siguiente forma: “La Biblia te dice que mires tus problemas a la luz de la eternidad”. O como lo diría A. W. Tozer: “El propósito deliberado de las Escrituras es mantenernos en el buen camino, hacernos útiles, induciéndonos a crecer hacia la madurez de un cristiano adulto, y prepararnos para el viaje a la eternidad”.
Esta etapa de nuestra vida en la tierra tiene como propósito prepararnos, educarnos y madurarnos para hacerle frente al propósito que Dios nos tiene preparado para nuestra vida en el cielo.
Escrituras
Acerca de este Plan
Vivimos en un mundo que nos envuelve y nos hace pensar que le pertenecemos. Nos han enseñado que la vida consiste en nacer, crecer y morir. Cuando nos convertimos en hijos de Dios, el Espíritu Santo nos enseña que somos ciudadanos celestiales y que este mundo es pasajero. Dios nos dio uno de los regalos más maravillosos de todos: vivir junto con Él por la eternidad.
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Nos gustaría agradecer a BibliaClips por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://www.facebook.com/bibliaclip/