El Dilema Del SalmistaMuestra

«La tarea está clara»

No puede haber duda, acerca de la voluntad de Dios para nuestras vidas, en sentido general. Se nos ordena guardar sus mandamientos. Un mandamiento, es un principio operativo general, una regla, una verdad. La verdad que Dios nos ha dejado en la Biblia está allí para nuestro propio bien. Nos ha comunicado los principios operativos del universo, para que encajáramos con ellos en perfecta armonía. 

Cuando era un adolescente, daba mantenimiento básico a mi viejo Chevrolet modelo 1954. Cuando levantaba el capó, era fácil cambiar las bujías, aun sin las herramientas adecuadas. ¡Ese viejo Chevrolet toleraba casi todo! Yo podía salirme con la mía aunque cometiera muchos «pecados» de mecánico. Hoy, ni siquiera me atrevo a cambiar el aceite en mi auto computarizado. Una o dos veces me atreví a añadir fluido para el limpiaparabrisas. 

Entre más complicada la máquina, se toleran menos errores y se necesita observar más las reglas y principios, que la gobiernan con precisión. Pregunte al dueño de un Jaguar. Ese es un automóvil muy bueno, pero hay que ver el mantenimiento que requiere. No se puede ir al almacén de descuento a comprarle bujías baratas.

David dijo, que el ser humano era una de las obras «formidables, maravillosas» de Dios. Somos un milagro de ingeniería. Significa que necesitamos seguir el manual del propietario con precisión, si queremos funcionar adecuadamente. Observe la palabra «muy» en el Salmo 119:4, no es suficiente dar un vistazo a la ligera a la Biblia, sus mandamientos han de ser muy guardados.

Este es el salmo que establece nuestra actitud hacia la Biblia, fija al nuevo creyente en el camino correcto, guía al creyente maduro hacia un entendimiento más profundo. La felicidad, está basada en nuestra actitud de corazón hacia la Palabra de Dios. El asunto no es, cuánto conocemos acerca de la Biblia, sino nuestro amor por la Biblia y obediencia a ella. Si usted ama la Palabra, y obedece lo que ya conoce, Dios se encargará de hacer que continúe creciendo en la gracia y el conocimiento del Señor Jesucristo. 

Este punto, representa una piedra de tropiezo a muchos de los que hemos andado con el Señor por muchos años. Después de tanto estudio y de escuchar la enseñanza de poderosos varones de Dios, es fácil pensar, que lo hemos logrado todo. Este salmo nos recuerda, que no es el mero conocimiento de la Palabra de Dios, sino el amor por la palabra, lo que hace la diferencia.