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David y Jonatán

Un verdadero amigo es siempre fiel.

David y Jonatán son dos amigos que se destacan en la Biblia, de hecho, su amistad era tan fuerte que se amaban profundamente, tanto que ambos se juraron fidelidad al otro.

Cuando David estuvo en peligro de muerte, Jonatán cubrió la espalda de David y salvó su vida varias veces al impedir que su padre Saúl lo matara.

Gran parte de esta increíble historia de amistad la encontramos en 1 Samuel 20: “Muéstrame la lealtad de quien juró ser mi amigo—porque hicimos un pacto solemne delante del Señor—o mátame tú mismo si he pecado contra tu padre. ¡Pero te ruego que no me traiciones entregándome a él! —¡Jamás!—exclamó Jonatán—. Tú sabes que si tuviera la menor idea de que mi padre pensara matarte, te lo diría de inmediato".

Recordemos que Jonathan no solo era el mejor amigo de David, sino también era el hijo de Saúl, quien era el enemigo más grande de David.

Una de las partes más fascinantes de esta historia es cuando años después muere Jonathan y David es nombrado rey; entonces David muestra bondad, amor y compasión a Mefiboset, uno de los parientes de Jonatán que aún quedaban con vida:

“Cierto día, David preguntó: «¿Hay alguien de la familia de Saúl que aún siga con vida, alguien a quien pueda mostrarle bondad por amor a Jonatán?” (2 Samuel 9:1).

Las acciones de David no solo estaban basadas en emociones, sino también en la promesa de un pacto. Si queremos ser verdaderos amigos, no debemos darle la espalda a los demás cuando pasan por pruebas de enfermedad, escasez o tristeza. ¡Al contrario! Podemos ser como David para mostrar amor, compasión y fidelidad a nuestros amigos aun cuando pasen por las peores etapas de su vida.

Tip: Los verdaderos amigos no se abandonan cuando más lo necesitan, ni te envidian cuando ven que estás teniendo triunfos y victorias.