DEL CAOS AL ORDEN DIVINOMuestra

EL ORDEN EXIGE ESFUERZO.

El desorden viene porque no se hace nada. Cuando una casa esta desordenada, es porque el dueño de esa casa no hace nada. El desorden no exige esfuerzo, el orden es todo lo contrario, exige un esfuerzo, pero a larga el orden genera una sensación de placer, de gozo y satisfacción interna. TODO ESTA ORDENADO.

El desorden no nos permite ver que ya están las cosas que necesitamos. En Cristo tenemos una vida completa, abundante, eterna. En esta vida todas las cosas se nos fueron dadas. Entender esta verdad nos librara de buscar en el mundo lo que ya en Cristo tenemos.

En vez de ir a la raíz de las cosas, buscamos respuestas rápidas, pretendiendo así llenar los vacíos de nuestras vidas. Los vacíos van a desaparecer cuando vayamos a la raíz: ORDENAR LAS COSAS.

El diablo tiene como propósito robar, matar y destruir, esa fue su intensión desde el principio. El desorden es la oportunidad del diablo para cumplir sus intenciones. El desorden en la familia, el desorden en el matrimonio, en la economía, los desordenes emocionales son las oportunidades para que las tinieblas operen.

Esfuérzate y sé valiente. Hoy es el día, la oportunidad divina para comenzar a ordenar las cosas, lo más maravilloso es que el Señor está con nosotros para ayudarnos en este proceso. ¡Comienza hoy!