RotondaMuestra

Probablemente todos desearíamos que hubiera algo que pudiéramos cambiar en nuestras vidas. Nos creemos las mentiras de que no somos lo bastante buenos, lo bastante listos, lo bastante guapos o, de hecho, no somos lo suficiente. Sentimos que la única manera de ser vistos o amados es esforzándonos más, consiguiendo más, teniendo más amigos, o simplemente organizando nuestras vidas de la manera que creemos que deberíamos. Dondequiera que estés en tu camino de fe, por favor escucha esta verdad: Eres amado. Tienes valor. Eres una nueva creación. No por nada que hayas hecho ni por nada que tengas que hacer, sino por a quién le perteneces. Cuando ponemos nuestra fe en Jesús, nos convertimos en una persona nueva. No hay nada que debamos cambiar para ganarla o conservarla. Simplemente la recibimos tal como somos, gracias al amor de Dios por nosotros.

Hoy, coloca tres recordatorios diarios en tu teléfono que mencionen este versículo. Haz que suenen en diferentes momentos a lo largo del día para mantener esta verdad en tu mente cuando la necesites.