El Sustento de DiosMuestra

El Dios que me sostiene

En Isaías 41:13 dice: Yo soy el Señor tu Dios, que te sostiene por la mano derecha y te dice: No tengas miedo, que yo te ayudo.

Desde el preciso momento que decidimos seguir a Jesús de todo corazón y con todas nuestras fuerzas; desde ese mismo instante estamos cubiertos por su sustento. Eso significa que en toda situación vamos a contar con la ayuda, la misericordia, el amor y la paz que solo Jesús puede dar.

Solo imagínate a unos padres que toman la mano de su hijo para protegerlo y cuidarlo de cualquier circunstancia. Asimismo nuestro Padre Celestial nos tiene agarrados de su mano para cuidarnos, pues nosotros somos sus hijos amados.

El sustento de Dios significa apoyar, aliviar, defender, proveer, proteger, cuidar, alimentar y muchas cosas más. En la Palabra podemos encontrar muchos ejemplos donde nos muestra como el sustento de Dios está presente en todo momento en nuestras vidas, y en la vida de nuestros seres queridos.

No podemos dudar ni temer, porque si nuestro Creador nos dice que no tengamos miedo es porque Él estará junto a nosotros en todo nuestro caminar en esta vida.

En Primera de Timoteo 6:8 dice: Así que teniendo sustento y abrigo, estemos ya satisfechos.

Qué gran privilegio tenemos los hijos de Dios de estar sustentados por la gracia y la misericordia de Él. Si no fuera por su sustento no podríamos sobrevivir, porque lo que nos mantiene en pie de lucha y esperanzados es estar protegidos por Él, desde que nos levantamos hasta que nos acostamos.

Nuestra vida no tendría ningún sentido si nos faltara el abrigo de nuestro Señor. Por lo tanto debemos estar satisfechos de lo privilegiados que somos, comparados con aquellos que tristemente no cuentan con esa cobertura, porque no quieren rendirse a los pies de Cristo.

RECUERDA

Dios te sostiene.

No estás solo, Dios está contigo.

Eres privilegiado y amado por tu Padre Celestial.