Lo Que Tus Ojos No VenMuestra

Hoy es el día para hacer preguntas.

Cada vez que leo el libro de Jueces, lo primero que resalta en mi mente es la frase “cada uno hacía lo que le parecía bien ante sus ojos”. Dios había entregado al pueblo en manos de los madianitas, debido a la desobediencia. Los madianitas eran un pueblo tirano, cruel, eran como “una plaga de langostas; llegaban en numerosas manadas de camellos, imposibles de contar, y no se iban hasta que la tierra quedaba desolada”, entonces la situación que vivía el pueblo de Israel ya era agobiante.

Era tal la miseria de los israelitas por causa de los madianitas, que clamaron al Señor pidiendo ayuda. Dios había utilizado a este pueblo para castigar a Israel y en su miseria “se refugiaron en cuevas en los montes, y cavernas, y lugares fortificados” (v. 2). Ahí se encontraba Gedeón. Déjame decirte que: “cuando Dios escucha tus quejas no se asusta de tus preguntas”. Gedeón se encontraba ocupado, sirviendo en ese lugar inhóspito, sacudiendo trigo, pese a lo que estaban pasando los israelitas, él trabajaba y no se resignaba a la situación.

Dios lo miró con agrado y el Ángel del Señor se le apareció diciendo “Jehová está contigo, varón esforzado y valiente” (v.12)

Prestemos atención a cómo el ángel hace describe a Gedeón: “varón esforzado y valiente”. ¿Será que Gedeón se calificaba de esa manera a si mismo? Gedeón respondió: “Señor, si el Señor está con nosotros, ¿por qué nos sucede todo esto? ¿Y dónde están todos los milagros que nos contaron nuestros antepasados? ¿Acaso no dijeron: El Señor nos sacó de Egipto?” Pero ahora el Señor nos ha abandonado y nos entregó en manos de los madianitas.

Era evidente que esas preguntas atormentaban a Gedeón.

¿Cuántas veces nosotros también tenemos tantas preguntas, tantas dudas, preguntas que tal vez piensas que no le agradan a Dios?. Hoy quiero que reflexiones sobre cada una de esas preguntas y tengas la certeza que Dios escucha cada una de tus quejas. Lo más increíble es que ninguna pregunta que puedas hacerle lo asusta. ¡Él es más grande que cualquier cuestionamiento que puedas plantearle! Hoy es el día para que puedas acercarte a él y derramar tu corazón, con toda libertad.

Qué maravilloso, has iniciado este plan de cinco días, estamos seguros que tu fe y valentía encontrarán combustible divino. Te recordamos que estos planes son extraídos de Un Milagro Cada Día y en este enlace puedes encontrar más contenido de edificación para ti.