La prioridad de la familia, según el modelo de Dios

¿Sabías que la idea de Dios es la familia? ¿Y que es el tesoro más importante que debes de cuidar? Hoy hablaremos justamente de este tema y te dejaré algunas pautas para que empieces a priorizar esta área sin descuidar tu crecimiento profesional, porque ya sé, no siempre queremos dedicarnos 24/7 a nuestra casa y a nuestros hijos por temor a no crecer como mujeres, pero no te preocupes, que siempre se puede encontrar un equilibrio entre lo uno y lo otro, solo necesitas el conocimiento y las herramientas para hacerlo.

Lo primero, es entender que estamos dentro de un mundo lleno de distracciones y de responsabilidades y es muy fácil perder la vista de lo que realmente importa. Te digo esto, porque es común dejarnos llevar de las corrientes sociales que nos dicen "no se puede ser mamá y empresaria al mismo tiempo" o "no se puede trabajar y ser mamá al mismo tiempo", te digo desde ya, eso es una total mentira.

Y en esta ocasión, no te voy a hablar de mí, te voy a hablar de la mujer virtuosa de proverbios 31, que además de dejar claro que es "mujer" también a lo largo del capítulo vemos que es mamá.

Algo que me llama la atención de este capítulo, es que esta mujer es una madre que no solo es diligente, sino que también es dedicada en lo que ama hacer, tenemos una empresaria, en lugar de una empleada, y ese es el pensamiento al que deberíamos llegar todas las mujeres que nos convertimos en madres, el buscar ser empresarias porque estamos llamadas a ser madres presentes.

Lo anterior, me lleva a una comprensión mucho más alta, ser mamá presente, no es quedarme a cambiar pañales y a vivir todo el día lavando la loza, es, estar en casa para cuidar de mis hijos mientras que ellos ven cumplir el propósito que Dios le ha dado a nuestra familia. Un propósito que va mucho más allá de un puesto o de una posición dentro de una organización que no es nuestra y que muy posiblemente es secular y no glorifica el nombre de Dios.

En ese orden, ahora podemos comprender, de una mejor manera, que el llamado a ser madres presentes va mucho más allá, se trata, del cumplimiento de nuestro propósito como familia, y de cómo, con nuestros dones, talentos, profesiones y/o experiencia laboral, nos convertimos en comunicadores del mensaje de salvación con nuestra propia organización y pasamos de ser empleados a empleadores.

Reto: Hoy, te reto a que reflexiones en esto que va mucho más allá de quedarme en casa cambiando pañales y lavando la loza, dile al Señor, "yo quiero hacer tu voluntad" y ten en cuenta que poco a poco vas a ir viendo como todas las cosas se organizan y van tomando claridad.