El Dios Que Nos SalvaEjemplo

Buenas noticias

El propósito de la Navidad es recordar a Jesucristo. Como dice Emanuel Elizondo: “Que nos transportemos a los eventos que transcurrieron esos días y cambiaron la historia de la humanidad. Que seamos testigos del cielo que se ilumina por un millar de ángeles. Que corramos con el corazón acelerado junto con los pastores hacia Belén. Que nos inclinemos y ofrezcamos los presentes junto a los magos. Que guardemos silencio en nuestro corazón y retengamos lo sucedido, como María”.

Era una noche más en los campos de Belén, pero no era una noche cualquiera para este grupo de pastores No es fácil suponer la reacción de estos hombres, pero imagino que una vez calmados, uno de ellos se atrevió decir: “Pensar que toda nuestra vida nos contaron acerca del Mesías. Algunos decían que vendría rugiendo como un guerrero y barrería a Roma de la faz de la tierra. Otros, esperaban que viniera como un rey arrasando con todos sus enemigos. Pero resulta que está ingresando a este mundo suavemente, como un susurro, un susurro de paz y esperanza para este mundo, que ni se ha enterado que él está llegando”.

Muchas personas aún no conocen a Cristo. Muchos viven sin la esperanza de un Salvador. Pero a pesar de lo que está sucediendo, este es un tiempo de buenas noticias: ¡tenemos un Salvador!