Betania - Un Corazón Que Anhela Su PresenciaMuestra

A Sus Pies - La Prioridad de Su Presencia

📚 Versículo clave: Lucas 10:39 "Esta tenía una hermana que se llamaba María, la cual, sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra".

Betania representa un lugar de descanso y comunión con Jesús. En la historia de Marta y María vemos dos actitudes diferentes ante la presencia de Cristo:

• Marta estaba ocupada sirviendo.
• María eligió detenerse y escuchar Su voz.

Muchas veces podemos estar tan ocupados con nuestras actividades diarias, incluso ministeriales, que olvidamos lo más importante: estar con Jesús. En nuestra cultura acelerada, donde la productividad y el hacer parecen ser los mayores valores, es fácil caer en la trampa de medir nuestra espiritualidad por lo que hacemos en lugar de por nuestra relación con Él. María entendió que la mejor inversión de su tiempo era sentarse a los pies de Jesús y recibir directamente de Él. No dejó que las expectativas de otros la apartaran de lo esencial. En contraste, Marta, aunque bien intencionada, permitió que la ocupación la distrajera de lo más valioso: la presencia de Jesús.

Cuando aprendemos a priorizar Su presencia sobre nuestras responsabilidades, nuestras acciones fluyen desde un corazón alineado con Él. A Sus pies encontramos dirección, paz y transformación. Nuestra alma se fortalece cuando pasamos tiempo en Su presencia, y eso nos capacita para servir con el corazón correcto, sin estrés ni cargas innecesarias.

✔ Hoy, aparta un tiempo intencional para sentarte a Sus pies.
✔ Apaga tu celular, elimina distracciones y dedícale unos minutos a la oración y la lectura de Su Palabra.
✔ Medita en lo que Jesús quiere hablarte en este momento.

• ¿Cuánto tiempo estoy dedicando a estar con Jesús en comparación con mis actividades diarias?
• ¿Qué cambios necesito hacer para priorizarlo más?

Oración 🙏: Señor, quiero ser como María. Ayúdame a valorar tu presencia más que cualquier otra cosa. Enséñame a detenerme y a escucharte. Quiero aprender a depender más de Ti y menos de mis propias fuerzas. Amén.