Lucha Y Triunfo: Qué Dice Dios Que Tenemos en CristoSample

En Cristo, tenemos seguridad eterna

"Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo. El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida. El conocimiento de la vida eterna. Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios." 1 Juan 5:11-13

"¿Cómo puedo estar seguro de una vida eterna?"

Era una pregunta que tuve como nuevo seguidor de Jesús. Quería estar seguro, pero me faltaba confianza porque sabía que yo había pecado, aunque haya intentado esconderlo de los demás.

Un cristiano no debía hacer esas cosas, ¿Verdad? Y si no he vivido siempre como Dios espera, ¿sigo siéndolo?

Sabía que Jesús murió por mis errores, pero ahora tengo que pagar yo mis deudas, ¿Verdad? El problema era que no podía.

Pero me estaba haciendo la pregunta incorrecta. La vida eterna no es algo del futuro. Es ahora. Juan 17:3 dice, "Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado."

La vida eterna no es alcanzada tras la muerte. La vida real es alcanzada al conocer a Jesús: "Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo. El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida" (1 Juan 5:11-12).

De la misma manera que yo no puedo ganarme mi propio perdón, no podía para vivir la vida que Jesús espera por mis propias fuerzas. Él tuvo que hacerlo todo. Tuvo que sujetar la cuerda por los dos extremos.

Es vergonzoso. Nunca quise tener que necesitar tanta gracia. Pero al mismo tiempo, es liberador.

Tenemos vida si el Hijo de Dios vive en nosotros a través de Su espíritu. Ese mismo Espíritu nos guía a obedecer a Jesús. Mi felicidad es encontrar y conocer a Jesús y dejar que su espíritu trabaje y refine el mío.

Aplicando: Juan nos contó que escribió esta carta a la gente que cree en Jesús para que puedan saber que tienen vida eterna. Nosotros lo sabemos porque la Palabra y Su Espíritu nos afirman que es cierto. La certeza de nuestra salvación no depende de cómo nos sintamos, sino de la integridad de Dios mismo.