Sueños Que MatanSample

SIGUIENDO EL SUEÑO DE DIOS

Cada persona es llamada por Dios para cumplir Su voluntad. Al igual que Noé, los Patriarcas, Moisés, David, los Profetas. Jesús y sus discípulos renunciaron a muchas cosas para poder llevar el mensaje de Dios a las personas y servir al prójimo. Nosotros también tenemos ese privilegio, pero también el deber. Jesús deja claro que Él no vino a la tierra para hacer su propia voluntad sino la de Aquel que le envió. Amados debemos meditar en muchas cosas que estamos haciendo ahora y ver si van de acuerdo al plan de Dios. Debemos reformularnos preguntas como estas:

¿Qué tan lejos me llevará Dios cuando cumpla mis metas?

¿Alcanzaré mis objetivos con Dios de mi lado?

¿Qué tan lejos estoy dispuesto a llegar por Dios?

¿Qué tan lejos llegaré con Dios hacia lo que anhelo?

¿Estamos haciendo lo que Dios nos pide, o lo que nosotros queremos?
Somos discípulos y por eso tenemos que saber si Dios está en nuestros planes de vida o nosotros estamos en Su plan. ¡Que el Señor bendiga nuestro andar y nos siga preparando como discípulos que extienden Su obra!