SALMOS 5:3-7
SALMOS 5:3-7 BLP
Señor, por la mañana escuchas mi súplica; de madrugada ante ti la presento y me quedo esperando. No eres un Dios que desee la maldad, en ti no encuentra refugio el malvado. No resisten tu mirada los necios, odias a los malhechores, aniquilas a los mentirosos; al cruel y al traidor, el Señor los aborrece. Pero yo, por tu inmenso amor, acudiré a tu morada y me postraré venerándote en tu santuario.