Desarrollando una amistad con El Espíritu SantoMuestra

Día 1.  Preséntate:

La única manera de tener una íntima relación con alguien es pasando tiempo juntos. De hecho, un sinónimo de relación es conexión. Cuando nos relacionamos con una persona, nos conectamos con sus gustos, deseos, sueños, su manera de ver la vida e, incluso, con su corazón. 

La diferencia entre tu mejor amigo y el resto de las personas, es que quieres compartirlo todo con él o ella. Apenas te sucede algo, tú le llamas, le buscas, le envías un audio de 5 minutos por WhatsApp, haces lo que sea para contarle lo que te ha sucedido. Incluso, pasa lo mismo cuando estás enamorado, y esto me recuerda que cuando estaba conociendo a mi esposo, él solo había venido de visita a Panamá, porque aunque es panameño también, tenía que regresar a Canadá, pues estaba estudiando allá. Y esa última noche, antes de tomar su vuelo, nos quedamos hablando por teléfono desde las 9 de la noche hasta las 7 de la mañana del día siguiente y cuando cerramos el teléfono fue solo para arreglarme e irme a trabajar. 

Cuando tenemos amigos también inventamos pijamadas, almuerzos, ir al mall, a un parque, solo para conversar, y durante todo el día pasamos imaginándonos cómo serán esas interminables conversaciones y lo felices que seremos al ver a nuestros amigos. Todo esto es lo que justamente hace la diferencia entre tu mejor amigo y el resto del mundo. 

Hoy es un grandioso día para iniciar la mejor y más sincera relación con el amigo que nunca nos falla y nos ama por encima de todo,  este amigo es el Espíritu Santo. 

Quizás te preguntarás: ¿Cómo haré para iniciar esta relación con Él?

• Hazle una invitación. Ahí donde estás, dile: Amigo, quiero conocerte e iniciar una íntima relación contigo hoy, sé que quizás no he estado pasando mucho tiempo contigo, pero te necesito y anhelo estar junto a ti. 

• Aparta un tiempo especial en tu día, ya sea que vayas a un parque, a tomar un café o simplemente le dediques un tiempo ahí en tu casa para conversar con él. 

Mi oración para ti hoy es que tengas la mejor de las citas con tu mejor amigo, y declaro en el nombre de Jesús, que Él te sorprenderá.