Devocional del día | EneroMuestra

Atento a la voz de Dios

Pasaje Central: Génesis 3:1-6

La serpiente era más astuta que todos los animales salvajes que el SEÑOR Dios había hecho, así que le preguntó a la mujer:

—¿Es cierto que Dios les dijo que no coman de ningún árbol del jardín? Y la mujer le respondió:

—Podemos comer los frutos de los árboles del jardín. Pero Dios nos dijo: “No deben comer frutos del árbol que está en medio del jardín, ni siquiera tocarlo porque si lo hacen morirán”.

Entonces la serpiente le dijo a la mujer: —Con seguridad no morirán. Incluso Dios sabe que cuando ustedes coman de ese árbol, comprenderán todo mejor; serán como dioses porque podrán diferenciar entre el bien y el mal. Cuando la mujer vio que el árbol era hermoso y los frutos que daba eran buenos para comer, y que además ese árbol era atractivo por la sabiduría que podía dar, tomó algunos frutos del árbol y se los comió. Su esposo se encontraba con ella, ella le dio, y él también comió.

Al leer este pasaje, podemos llegar a pensar: ¿Cómo fue posible que no obedecieran a la advertencia que con anterioridad Dios le había dado a Adán? Sin embargo, ¿cuántas veces nosotros hacemos lo mismo?

Podemos encontrar en la Biblia que se nos insta a no hacer determinadas cosas y esto lo podemos observar en algunos versos de Éxodo 20, por ejemplo: No tengas ningún otro dios aparte de mí. No te hagas ninguna clase de ídolo ni imagen de ninguna cosa que está en los cielos, en la tierra o en el mar. No te inclines ante ellos ni les rindas culto, porque yo, el SEÑOR tu Dios, soy Dios celoso, quien no tolerará que entregues tu corazón a otros dioses. No hagas mal uso del nombre del SEÑOR tu Dios. No cometas asesinato. No cometas adulterio. No robes. No des falso testimonio contra tu prójimo. No codicies.

Y todas estos No, son para nuestra protección.

Qué importante es, que estemos atentos a las advertencias de Dios., porque Él desea nuestro bien.

Medita: ¿Estás atento a la voz de Dios?