Renovando la mente y la bocaMuestra
Libres de contaminación
Los hombres más sabios de Israel fueron llevados ante el rey y él deseaba contaminarlos. Daniel decidió que no comería nada porque quería conservarse puro y así demostrarle al rey que mantendría sus convicciones firmes y no se doblegaría ante nada ni nadie.
Si leemos la historia de Daniel y sus amigos, nos podemos dar cuenta de la importancia que esta decisión tuvo sobre ellos, cómo lograron mantener sus convicciones intactas ante la tentación y el peligro que experimentaron.
El Señor tenía una relación especial con Daniel, al punto que le revelaba cosas que a nadie más le contaba. En casa, siempre debe haber un Daniel que, a pesar del miedo, logre tener la visión de lo que el Señor quiere hacer en medio de cualquier circunstancia.
Dejemos de prestarle atención a las palabras que este mundo nos da. Apartémonos de las conversaciones que nos provocan miedo y ansiedad. Comencemos a buscar la Palabra que Él tiene para cada uno de nosotros. Desde el primer día que disponemos nuestro corazón, podemos estar seguros de que Él envía Su respuesta.
Escritura
Acerca de este Plan
La Biblia afirma que el hombre comerá del fruto de sus labios y que, si quiere ver días buenos, cuide su lengua y sus palabras. Estas palabras inician primero en nuestra mente y luego se dan a luz con la boca. Si renovamos la forma en que pensamos, cambiarán nuestras palabras, y el fruto de nuestra vida será diferente.
More
Nos gustaría agradecer a Casa De Dios por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://casadedios.org/