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Ezequiel 40:24-49

Ezequiel 40:24-49 NVI

Luego me condujo hacia el sur y allí había una puerta que daba al sur. Midió las celdas, los pilares y el vestíbulo, y todos estos tenían las mismas medidas que los anteriores. La puerta y el vestíbulo también tenían ventanas a su alrededor, al igual que los otros, y medían cincuenta codos de largo por veinticinco codos de ancho. También se subía a la puerta por medio de siete gradas; frente a ella estaba su vestíbulo. Los pilares a ambos lados tenían grabados de palmeras. El atrio interior tenía una puerta que daba al sur. El hombre midió la distancia entre una puerta y otra en dirección sur y era de cien codos. Luego me llevó por la puerta del sur hacia el atrio interior. Midió la puerta del sur, la cual tenía las mismas medidas que las anteriores. Sus salas, sus pilares y su vestíbulo también tenían las mismas medidas que los anteriores. La puerta y el vestíbulo tenían ventanas a su alrededor; ambos medían cincuenta codos de largo por veinticinco codos de ancho. En su derredor había unos vestíbulos de veinticinco codos de largo por cinco codos de ancho. Su vestíbulo daba hacia el atrio exterior; sus pilares también tenían grabados de palmeras. A esta puerta se llegaba subiendo ocho gradas. También me llevó al atrio interior que daba al oriente y midió la entrada, la cual tenía igual medida que las anteriores. Sus salas, sus pilares y su vestíbulo también tenían las mismas medidas que los anteriores. La puerta y el vestíbulo tenían ventanas a su alrededor; ambos medían cincuenta codos de largo por veinticinco codos de ancho. Su vestíbulo miraba hacia el atrio exterior. Los pilares tenían grabados de palmeras a cada lado. A esta puerta se llegaba subiendo ocho gradas. Luego el hombre me llevó a la puerta del norte y la midió: esta tenía las mismas medidas que las otras. También tenía celdas, pilares, vestíbulo y ventanas a su alrededor, y medían cincuenta codos de largo por veinticinco codos de ancho. Su vestíbulo miraba hacia el atrio exterior. Los pilares tenían grabados de palmeras a cada lado. A esta puerta se llegaba subiendo ocho gradas. Había una sala que se comunicaba con el vestíbulo de cada puerta. Allí se lavaba el holocausto. En el vestíbulo de la puerta había cuatro mesas, dos de cada lado, donde se mataba a los animales para el holocausto, para la ofrenda por el pecado y para la ofrenda por la culpa. Fuera del vestíbulo, por donde se subía hacia la entrada de la puerta norte, había otras dos mesas; y al otro lado del vestíbulo de la puerta había dos mesas más. De manera que había cuatro mesas de un lado de la puerta y cuatro del otro, es decir, ocho mesas en total, donde se mataba a los animales. Para el holocausto había cuatro mesas labradas en piedra, que medían un codo y medio de largo por un codo y medio de ancho, y un codo de alto. Sobre ellas se colocaban los instrumentos con que se mataba a los animales para el holocausto y otros sacrificios. Colocados en el interior, sobre las paredes en derredor, estaban los ganchos dobles, que medían un palmo de largo. Sobre las mesas se ponía la carne de las ofrendas. En el atrio interior, fuera de las puertas interiores, había dos salas para cantores. Una de ellas estaba junto a la puerta del norte que daba al sur y la otra, junto a la puerta del sur que daba al norte. Aquel hombre me dijo: «La sala que da al sur es para los sacerdotes encargados del Templo, mientras que la sala que da al norte es para los sacerdotes encargados del altar. Estos son los hijos de Sadoc y son los únicos levitas que pueden acercarse al SEÑOR para ministrar delante de él». Luego midió el atrio, que era un cuadrado de cien codos de largo por cien codos de ancho. El altar estaba frente al Templo. Entonces me llevó al vestíbulo del Templo y midió sus pilares; cada uno medía cinco codos de grueso. El ancho de la puerta era de catorce codos, mientras que las paredes laterales de la puerta medían tres codos de ancho. El vestíbulo medía veinte codos de ancho por doce codos de largo y se llegaba a él por un tramo de escalera. Junto a cada pilar había una columna.

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