Personas LibresEjemplo

¿Alguna vez viste a un músico muy bueno tocar un instrumento? ¿O viste a algunos atletas increíbles competir en los Juegos Olímpicos en la televisión? Hay algo emocionante en ver a las personas mostrar una habilidad o capacidad realmente impresionante. Ya sea que creas que nacieron con talentos excepcionales o que tuvieron que trabajar duro para conseguirlos (o tal vez una mezcla de ambos), una cosa es segura: Están usando sus dones de maneras increíbles para inspirar a los demás. ¿Sabías que como seguidor de Cristo, lo mismo se aplica a ti? Puede que no seas un músico o atleta olímpico increíble, pero tienes dones únicos que Dios te dio para servir e inspirar a los demás. Esta semana, pregúntale a un padre, líder de grupo pequeño o amigo cercano en qué creen que eres bueno; cuáles son tus dones únicos.Luego, busca formas de usar ese don para servir o inspirar a otra persona.