Logo de YouVersion
Ícono Búsqueda

Dolor en el liderazgoMuestra

Dolor en el liderazgo

DÍA 2 DE 5

Día Dos: ¿Qué te lleva a actuar?

El idealismo es algo maravilloso, hasta que se torna en una carga abrumadora. Los líderes en todo ámbito sueñan con impactar un sinnúmero de vidas, pero si se descuidan, las expectativas poco realistas, acompañadas por desilusiones genuinas y el conflicto, puede hacerlos sentirse inseguros o insignificantes. Todos nosotros, sin excepción alguna, desde la persona más exitosa a la que apenas comienza, necesitamos llegar a la realización de que cada bendición y don que Dios nos ha otorgado para dirigir a la iglesia tiene sus bendiciones y sus limitaciones. Solamente Jesús poseía todos los dones. Y siento ser la persona que tenga que decírtelo, pero ¡tu y yo no somos Jesús!

Tu felicidad es inversamente proporcional a los deberes en tu vida. Las expectativas exageradas inevitablemente te llevarán a la desilusión: una forma de dolor común en el liderazgo. Podemos elevar nuestro umbral de dolor por mucho al tener una perspectiva de nosotros mismos más realista de los dones dados por Dios,  y de nuestra necesidad de que otros llenen los vacíos. Al mirarnos en el espejo, quisiéramos ver en nuestro reflejo un súper cristiano con capa, pero dicha ilusión puede eventualmente arruinar todo lo que es hermoso en nuestras vidas.

Podemos observar en la Biblia y en la historia de la iglesia un patrón claro de cómo Dios obraba con su pueblo. Sin importar cuán talentosos o dotados fueran, Dios los dirigía a la humildad antes de usarlos. El autor A. W. Tozer creía que pasar por el dolor es esencial para que cualquier líder llegue a ser moldeable en las manos de Dios. En uno de sus más famosos libros el escribió, “Es dudoso que Dios pueda bendecir grandemente a un hombre si no lo ha herido profundamente.” Los métodos de Dios pueden variar, pero siempre logra de una manera u otra captar la atención plena de una persona para enseñarle las lecciones más fundamentales de la confianza.

¿Qué te lleva a actuar? Donde sea que sirvamos, cada uno de nosotros somos una mezcla increíblemente compleja de fortalezas y carencias otorgadas por Dios, objetivos nobles y deseos egoístas, impulso y apatía, desprendimiento y retención, amor y temor. Si no estamos percatados de las potentes fuerzas que operan debajo de la superficie de nuestras vidas, el dolor nos agarrará desprevenidos y reaccionaremos a la defensiva en vez de con sabiduría y fuerza. 

Día 1Día 3

Acerca de este Plan

Dolor en el liderazgo

Como líderes, es garantizado que experimentaremos el dolor. Todo cambio trae crecimiento y con eso llega la incomodidad. Cuando tenemos la perspectiva correcta del dolor, podemos utilizarla en una manera que honre a Dios.

More

Nos gustaría agradecer a Four Rivers Media por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: http://www.samchand.com/