Confiando en Dios durante las pruebasMuestra

Busca a Dios en los cambios

Todas las generaciones han experimentado este mismo fenómeno: el cambio. Pero lo que esta generación está percibiendo, como ninguna otra, es la velocidad del cambio. El problema al que nos enfrentamos hoy es la velocidad del cambio y el alcance del cambio; y el tipo de cambio; y la magnitud del cambio. ¿Te das cuenta de que las cosas están cambiando más rápidamente de lo que solían cambiar? Cada vez es más y más rápido.

En Génesis 8:22 la Biblia dice esto: “Mientras la tierra permanezca, habrá cultivos y cosechas, frío y calor, verano e invierno, día y noche”. En otras palabras, Dios instituyó el cambio. Las cosas no se quedan igual. Hace calor, hace frío: llega la primavera, luego el verano. Hay épocas en la vida. Las cosas cambian. El cambio es inevitable.

Busca a Dios en los cambios de la vida. El profeta Jeremías así lo expresó en una interesante versión: “Si me buscan EN SERIO, ustedes me encontrarán…”. Me gustó cuando dice que lo busquemos en serio. Podemos buscar a Dios bajo premisas o motivos completamente equivocados. Quizá lo hacemos por costumbre, o porque no tenemos otro remedio. Para quienes somos padres y hemos vivido la fuerte experiencia de perder, por unos instantes, a uno de nuestros pequeños hijos: ¿no es verdad que la vida se nos va en eso? Recuerdo el día en que nuestro hijo primogénito, siendo pequeño, desapareció de nuestra vista en un centro comercial. Solo Dios sabe los sentimientos de frustración, angustia y desesperación que tuvimos esa mañana. Allí fue cuando entendí qué significa buscar a Dios “…con todo el corazón.”

¿Sabes cuál es nuestro problema? Cuando llegan los cambios, buscamos todo lo demás, excepto al Señor. Buscamos una solución rápida. Buscamos una solución fácil. Buscamos una salida. Buscamos la comodidad. Buscamos alivio. Cuando lo que hay que buscar es al Señor. Necesitas buscar a Dios. Cuando estás en medio de un contratiempo, las preguntas incorrectas son: ¿Cuál es la solución rápida? ¿Cómo puedo salir de esto? ¿Cómo puedo salvar mi pellejo? ¿Cómo puedo cambiar las cosas ? La forma correcta es comenzar por BUSCAR AL SEÑOR, no hay que buscar la comodidad. No hay que buscar el alivio. Busca al Señor y, en Él, obtendrás todas estas otras cosas: la solución, la respuesta, el alivio, la comodidad , la fuerza y ​​todo lo que necesitas. Busca a Dios en los cambios.