Reto Detox Para El CorazónMuestra

 Vencido

Jesús está junto al lago de Genesaret y la multitud le rodea para escucharle. Jesús visualiza dos barcas a la orilla del lago, los pescadores acababan de llegar y estaban lavando sus redes, cuando Jesús le pidió que las alejaran un poco de la orilla para él usarlas como púlpito y predicar en ellas desde el mar.

Al culminar su predicación, Jesús dice “boga mar adentro y echad vuestras redes para pescar”; luego se evidencia que Pedro había estado tratando de pescar durante toda la noche y no había pescado nada.

¿Has estado frente a una situación de la cual no tienes idea de cómo salir? ¿Has tenido necesidad de adquirir algo, sin tener los recursos para conseguirlo? Horas, días, meses, corriendo contra reloj… planeando y aplicando estrategias para poder hacer frente a eso que enfrentas. Pero no pasa nada, bueno, sólo el tiempo, que te recuerda “ya estás casi vencido”. Y te cansas de luchar, y decides volver a la orilla y soltar en ella todas tus esperanzas de que podrás algún día salir de esa situación. Literalmente te rindes y estas dispuesto a aceptar lo que la vida haya deparado para ti. Y en esta lucha mental que tienes en el momento de rendirte, Jesús te hace una llamada, te pide que le des lo que tienes, esa pobre barca en la cual no has podido pescar nada… Y al recibirla lo que hace es hablar a otros de su reino. 

Te quedas ahí escuchándole, como el que está y no está, una parte de ti siente la esperanza que sale de sus palabras, otra parte ya está demasiado sumergida en la resignación. Jesús al culminar de predicar te pide que vuelvas a intentarlo, pero que esta vez vayas más lejos.

Bogar significa mover los remos en el agua para hacer avanzar una embarcación. Jesús no sólo te pide que vuelvas a intentar hacer frente al problema, no sólo que vuelvas al punto de frustración donde estuviste, sino que vayas más lejos. Es como cuando alguien se está ahogando, no podrá salir pataleando, deberá tomar impulso y descender para que la fuerza del agua le saque a flote.

Desconozco la situación que pudieses estar enfrentando y si ya has tomado la decisión de dejar de intentarlo. Dios te dice “Boga mar adentro”. Inténtalo otra vez aún con más fuerza, pero esta vez en el nombre de Jesús.