Imparable Muestra

¿Te gusta la música? ¡Yo soy una apasionada! Estoy casi todo el día escuchando música; de hecho, ahora mismo estoy escuchando música instrumental mientras escribo.

Una de las cosas que más me fascina es cómo los músicos son capaces de dedicar horas y horas cada día a ensayar de manera constante, para así perfeccionar cada vez más la técnica con su instrumento. En mi caso soy una persona con muy poco sentido musical, nunca he llegado a desarrollar ninguna técnica musical. He tenido varios momentos en mi vida en los que he invertido tiempo a practicarlos, pero nunca ha llegado a convertirse en una constante diaria. ¿Qué es lo que me ha faltado para convertirme en músico? Precisamente esa constancia diaria. 

La constancia es lo que marca la diferencia. La Biblia dice: "Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano". Sí, tu firmeza y tu constancia son las que marcan la diferencia en tu vida cristiana. Es gracias a ellas que puedes crecer en tu vida espiritual, y servir también al Señor en la medida en la que vas siendo cada vez más maduro en la fe. ¡Sí, la constancia te hace crecer de manera constante! 

A lo largo de estos días vamos a analizar algunas claves que te ayudarán a crecer constante e imparablemente en el Señor.