Yo Dependo Muestra

Yo dependo de su provisión 

Dios le dijo a Abraham: “Yo soy más que suficiente, la fuente de toda bendición.”

¿Qué o quién es tu fuente? 

En tiempos de incertidumbre, en medio de la inflación, en medio de la devaluación, en medio de elecciones políticas, ¿quién es tu fuente? Al ver diariamente noticias negativas en la televisión o las redes sociales, ¿quién es tu fuente?

Yo dependo de la provisión de Dios. 

Fue hace unos meses que tuve esta revelación a otro nivel. Recientemente he vivido un proceso en el cual Dios me llevó a ponerme de rodillas y recordar que Él es mi fuente y mi proveedor. Me encontré en una posición en la cual tuve que tomar decisiones importantes y sentí que Dios, en medio de todo eso, me animaba a seguir avanzando, confiado en que Él alcanzaría provisión para lo necesario. 

Depender de su provisión no significa que neguemos la realidad. Significa que vivimos conforme a la economía del cielo, que decidimos elevar nuestra fe. Significa que durante la semana, cuando llegan reportes negativos, podemos pararnos sobre la palabra de Dios y declarar firmemente que no estamos sujetos a las condiciones de este mundo, sino a las del Reino de Dios. 

Yo entiendo que no dependo de mi jefe, ni de la economía, ni del gobierno, ni de mi salario. Dependo de mi Dios porque Él es más que suficiente, Él es la fuente de toda bendición, Él es mi proveedor. 

No fuimos llamados a vivir como víctimas, derrotados y limitados por las condiciones de este mundo. Nuestra dependencia está en un Dios que nunca falla y que nunca nos va a abandonar. Su economía es mucho más sustentable que la nuestra. 

En Filipenses 4, Pablo dice que sabe lo que es vivir en escasez y en abundancia, lo que es tener hambre o la mesa llena. Luego agradece a los Filipenses por su apoyo y declara que Dios les proveerá de todo lo que necesiten.

Dios también proveerá todo lo que necesitas hoy, no conforme a la economía del país o a lo que sucede a tu alrededor, ¡sino conforme a las gloriosas riquezas que tenemos en Cristo Jesús!

Durante años yo he sembrado semilla tras semilla, y realmente he visto la fidelidad de Dios. Hoy creo que para algunos es tiempo de hacer una extracción de semillas sembradas en el pasado, pero todo va a depender de su nivel de fe y dependencia. 

Deja de buscar provisión en lugares que Dios no diseñó para eso, empieza a depender de quien es más grande que cualquier otra fuente.