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DÍA 2 DE 5

Parte I: Corazones como Gomer 

Oseas 1: 2-3 (HCSB) 

Un corazón promiscuo 

A principios de la década de 2000 había una canción muy pegadiza siempre en la radio llamada Promiscuous Girl. Se trataba de una chica que básicamente estaba dispuesta a hacer lo que el chico promiscuo quería que hiciera, siempre que fuera divertido. La chica de esta canción básicamente había renunciado al encontrar su principe azul, y estaba lista para decidirse por lo que se sentía bien. Ahora. La palabra promiscua cuando se usa en la Biblia se usa para indicar a una persona que se aleja de lo que es correcto. Ya sea teniendo relaciones sexuales irresponsables o adorando ídolos, estaban eligiendo alejarse de lo que sabían que era bueno para ellos. Gomer era una niña promiscua con un corazón promiscuo. Aunque sabía lo que debía hacer, decidió hacer el mal de todos modos. 

Oseas 2:5 (HCSB) 

Oseas 2:7 (HCSB) .

Reflexión personal 

¿Alguna vez ha sido etiquetado? 

¿Qué crees que ve el mundo cuando te mira? 

¿Alguna vez has sentido que te has ido demasiado lejos? 

¿Has perseguido cosas que no te pueden satisfacer? 

Incluso ahora, mientras lees esto: ¿Buscas satisfacción en otras cosas que no sean Dios? 

Lo importante es saber que no eres el único, y NUNCA te has ido demasiado lejos. La Biblia dice que TODOS hemos pecado, y TODOS hemos fallado en cumplir con los estándares de Dios (Romanos 3:23). Nadie ha podido ser 100 por ciento bueno y sin culpa. La buena noticia es que Dios lo sabe, y no se ve amenazado por eso, por eso dio una respuesta. Él envió a su hijo a perseguirnos y traernos de regreso a Él tomando nuestro lugar en la cruz. Jesús murió para recibir nuestro castigo y demostrar el amor incondicional de Dios por ti.

Es una locura lo atrapados que quedamos en nuestro pecado. Somos realmente buenos para convencernos de que solo somos lo que hemos hecho, cuando la verdad es que Dios nos ama por lo que somos. Y somos más que nuestro pasado, más que nuestras etiquetas, más que nuestra promiscuidad. Cuando Dios te mira, ve el corazón debajo de todos tus pecados y vergüenzas. Un corazón que puede estar magullado y roto, pero todavía anhela un amor incondicional que solo se puede encontrar en Él. Romanos 5:8 dice que Dios mostró su amor incondicional por nosotros en esto: que mientras todavía éramos pecadores, envió a su hijo a morir por nosotros. Su amor no depende de lo que haces y su corazón es que volverías a él.

1 Juan 4: 9-10 (MSG) 

Oración 

 Señor, permíteme volver a ti y a tu amor incondicional. Sé que he tenido un corazón infiel, pero también sé que nunca has dejado de ser fiel. Sé que me amas, y enviaste a Jesús para reparar el puente entre tú y yo. Permíteme reconocer tu amor por mí y verme a mí mismo como me ves a mí, ya no como una niña promiscua, sino a tu hija. 

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