Sal De Mi MenteMuestra

La vida parece un desastre cuando cedemos a la tentación. Tal vez sea porque ceder a la tentación conlleva sentimientos de culpa, vergüenza y arrepentimiento. A veces incluso parece que no hay escapatoria. Si te has sentido de esa manera, no te desanimes. Dios nos ofrece perdón a todos nosotros. Su ayuda y fortaleza están ahí para darnos una salida. 

¡Además, Dios también nos ha dado personas que nos aman y se preocupan por nosotros para nos ayuden! 

Habla sobre las luchas que has enfrentado por la tentación con alguien en quien confíes, alguien que sea sabio. Pídeles que te ayuden mientras trabajas para resistir la tentación en tu propia vida.