Las Grandes PreguntasMuestra

¿Alguna vez un amigo o un familiar quebró tu confianza? Tal vez compartió algo que le pediste que no hiciera, no fue honesto contigo o hizo algo que realmente te hirió. Cuando eso sucede, ¡puede ser difícil volver a querer confiar! Pero la buena noticia es que, en Dios, encontramos al único que nunca quebrará nuestra confianza. Cuando sentimos que no estamos seguros de qué más hacer o en quién podemos confiar, podemos mirar a Dios, sabiendo que podemos confiarle todo lo que pasa en nuestras vidas. 

Para recordar esto, memoriza este corto versículo. Que sea el primer paso que des para confiar en Dios esta semana.