Cómo Detener El Miedo, La Preocupación Y La InseguridadMuestra

Cuando pienso en grandes obstáculos, recuerdo cuando Dios le ordenó a Israel que entrara en la Tierra Prometida. Justo antes de entrar, Dios les dijo que eligieran doce espías para que entraran y exploraran la tierra.

Muchos años antes, Dios les había prometido esta tierra. Dios le había dicho a Abraham, Isaac, Jacob y Moisés que esta era su tierra. Creo que esta es una promesa que sigue vigente hoy y seguirá vigente para siempre. Ésta es una tierra que Dios les ha prometido, una tierra que Él había descrito como una que fluye leche y miel. Entonces, ¿por qué Dios les diría que fueran a espiar la tierra si ya se la había prometido? ¿No sería una pérdida de tiempo?

Dios les estaba dando una prueba de fe. Sí, les había prometido la tierra, pero quería que ejercitaran la fe y la confianza en Él. A menudo, es por eso que aparecen desafíos u obstáculos en nuestras vidas. A veces, los obstáculos son cosas que ponemos en nuestro propio camino. Dios incluso puede usar algo que sucede cuando tomamos una mala decisión. No debemos hacer algo malo sólo porque queremos ver que Dios reciba la gloria. Habrá muchos obstáculos que Dios permitirá que lleguen a nuestras vidas, por lo que debemos dejar de poner obstáculos en nuestro propio camino.

Quizás haya un diagnóstico de cáncer. Quizás estés enfrentando el nuevo año solo, como padre soltero o viudo. Es posible que te hayan despedido de tu trabajo. Estos son obstáculos que Dios ha permitido en tu vida, y Dios puede usarlos para Su gloria. Los obstáculos de la vida pueden parecer tan enormes, tan insuperables, pero Dios nos está llamando a ejercitar la fe y confiar en Él.