El camino correctoMuestra

Los magos alabaron

¡Qué sabios! Creyeron y pusieron sus creencias en acción y buscaron al Rey, a Jesús. Entonces, ¿qué pasó cuando llegaron al lugar donde la estrella los había llevado? Mateo nos dice que ellos adoraban al Rey. Echemos un vistazo por encima del hombro de los reyes magos.

El escritor del evangelio, Mateo, nos dice que los magos: «se regocijaron con una alegría sumamente grande». Esto se puede traducir de esta manera, tuvieron una alegría inmensa. Imagina encontrar lo que estabas buscando y luego tenerlo más grande de lo que habías anticipado. Esto es lo que experimentaron los reyes magos: ¡la mayor alegría! Nos recuerda lo que el ángel dijo a los pastores en los campos la noche del nacimiento de Jesús: «Habrán buenas noticias de gran alegría para todas las personas». El evangelio, literalmente la buena noticia, es que un Salvador ha nacido para toda la humanidad.

Los reyes magos hicieron lo que haría una persona sabia al presentarse ante el Rey de Reyes. Mateo nos dice que: «se postraron y lo adoraron», es lo que se debe hacer cuando se encuentre en la presencia de Dios, como dice la canción, «Tu luz perfecta». Ellos lo adoraron. Plantea la pregunta esta Navidad: ¿Lo adoramos? Cantamos las canciones y decoramos el árbol, pero ¿realmente lo adoramos por el Rey que es?

Los magos hicieron una cosa más, presentaron regalos de oro, incienso y mirra. El oro, que significaba la entrega de posesiones de este mundo al servicio del Rey, más tarde sería utilizado por José para cuidar a su familia cuando fueron enviados a Egipto para su protección. El incienso fue una fragancia que se usó para dar un aroma maravilloso a una situación odiosa, como una tumba funeraria. Y mirra, que era una especia de entierro. Sin saberlo, los reyes magos trajeron regalos que predijeron la vida de este Rey... Nació para morir por los pecados del mundo, un Rey especial en verdad.

Los reyes magos fueron verdaderamente sabios porque creyeron en las señales frente a ellos que hablaban del nacimiento de un gran Rey. Lo buscaron siguiendo su estrella y el camino correcto que Dios había puesto. Y lo adoraron como el Rey que todavía es.

¿Cómo te prepararás para celebrar el nacimiento del Salvador del mundo este año? Por favor, busca la quinta parte de la serie, El momento adecuado.

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