[Visión 2020] El hogar: SabbathMuestra

Decisión para el decenio

Estamos a solo unos días de una nueva década: ¡no solo un año nuevo, una década completamente nueva! Piensen en todo lo que sucederá entre 2020 y 2030. Se celebrarán tres elecciones presidenciales. Un niño de diez años votará en las últimas elecciones de esta década. El equipo de Los Astros podría ganar la Serie Mundial; el equipo de los Rockets, el campeonato de baloncesto. Mi hijo de 18 años tendrá 28 hacia el final de la década. Yo podría ser abuelo para entonces. Mi hija que tiene 11 años; tendrá 21. ¡Guau!

Este es el único año con dígitos iguales que experimentaremos en nuestra vida: 2020. Dudo que cualquiera de nosotros estará por aquí para el 2121. ¿Queremos estar presentes para el año 2121? No. Alguien que es un bebé podría querer quedarse, pero para todos los demás, la respuesta es no. No quiero vivir hasta los 160 años.

Pero para 2020, aquí está lo que quiero que hagamos: No quiero que comencemos este domingo diciendo: «¡Vamos! Hagamos estas grandes cosas». La mayoría tenemos horarios que están llenos a más no poder. No hay margen en nuestras vidas y tenemos que dejar algunas cosas para tener un corazón tranquilo. En el primer domingo de la década, date cuenta de que el mayor impacto y bendición en tu vida, en realidad podría ser revisar y eliminar algunas cosas de tu agenda, en lugar de añadir diez cosas más a tu vida. Retira algunas actividades de tu vida, dos actividades o cinco, o cualquier número que funcione para ti, para que tengas un poco de descanso. Consigue un poco de Sabbath en tu vida. ¿No es eso vital? ¿Se puede comenzar la década con un soplo de aire fresco? 

Comencemos esta década con descanso. ¿Cómo podría ser para nosotros si descansáramos? ¿Conoceríamos mejor a Dios? ¿Haría Dios más cosas? ¿Veríamos que él abre puertas para nosotros? Dios hará algunas cosas increíbles, pero esto no se basará en nuestro esfuerzo, sino en nuestra entrega. Primero, vamos a entregar la década a Dios. A continuación, vamos a pedir descansar en fe. Y, por último, vamos a pedir el valor para eliminar las cosas que nos impiden pasar tiempo con él y estar disponibles para hacer lo que él nos pide.