Vencimos el laberintoMuestra

"Justo en ese instante escucho Tus insistentes y feroces susurros a mi alma

y aunque mi ser esté lleno de inseguridad, Tu voz es inconfundible

sé que debo guiarme por lo que dictes pues eres quien me llevará a la calma

así que, aunque quiera rendirme, no lo hago, pues a Tu lado nada es imposible.”

Tal como hablábamos ayer la única forma de conocer a Dios de una manera extraordinaria y sobrenatural, además de leer las escrituras, es pasando tiempo de intimidad y calidad con el justo como lo hacemos con nuestros amigos, porque Dios es y debería ser nuestro mejor amigo.

Que increíble puede ser lograr decir que la voz de Dios ha llegado a ser “inconfundible” en tu vida y es que todos tenemos a una persona, ya sea un amigo, un familiar o tu misma pareja a la que conocemos de forma detallada, su forma de caminar, su tonalidad al hablar, que con una sola palabra sabemos reconocer, esa es exactamente la forma en la que Dios quiere que le conozcas y sabiendo quien es Dios para ti, lo que significa en tu vida y lo que el desea para la misma, no va a ser nada difícil poder llegar a la calma con la seguridad de que es Dios hablándote en cada instante..

El ánimo que Él nos provee a lo largo cada situación es con lo que contamos para atravesarla sin temor algún y por muy cliché que suene, la frase más acertada en nuestra realidad es que para Dios no existe algo que sea imposible, no hay problema que Él no pueda solucionar, pensamiento que no pueda cambiar, tentación o culpa que Él no pueda borrar de su pensamiento y del tuyo, ansiedad o depresión que no pueda transformar en alegría y gozo.

Quizás te angustia tu situación, pero es por el simple hecho de que sabes que tu solo no podrás, tus fuerzas no alcanzaran, pero las de Dios si alcanzan y debes permitirles abrazarte, todo lo que Él te entrega para la batalla es más que útil y perfecto, con eso veras como al lado de Dios, los problemas se ven como algo diminuto ¡porque lo son!