Cosas que valen la penaMuestra

EL ENEMIGO DEL PROPÓSITO

Si perseguir las cosas que importan es tan grandioso, ¿por qué no somos más los que perseguimos nuestras metas más queridas? En una palabra, por las distracciones. Cosas que se interponen en el camino.

Para Marta, la amiga de Jesús, sus propias expectativas sobre las exigencias de la hospitalidad ocupaban un lugar más importante que el de sentarse a los pies de su Salvador. "Marta, Marta", la reprendió el Señor, "te preocupas y te angustias por muchas cosas, pero son pocas las que necesitas -o de hecho sólo una” (Lucas 10:41-42). Y entonces Jesús hizo esta importante declaración: "María ha elegido lo que es mejor”.

¿Acaso no queremos todos estar ante Jesús y oírle decir: "Has elegido lo que es mejor”?

Entonces debemos recordar que el enemigo de la intencionalidad y de una vida vivida para la gloria de Dios es la distracción.

Ahora, claro, no todas las distracciones son malas todo el tiempo. Muchas veces, no hay nada malo en hacer cosas que distraigan nuestra mente: ver un programa de televisión, o leer una novela, o hacer jardinería, o cualquier otra cosa que nos entretenga o relaje. El problema comienza cuando las distracciones se apoderan de nuestra vida y dejan de lado otras actividades más importantes.

Dedicarse a las distracciones puede pasar de ser un pasatiempo ocasional a convertirse en una parte arraigada de nuestro estilo de vida. Esto es lo que sucede cuando pasamos todo nuestro tiempo libre jugando. O hacemos tanto ejercicio que no nos da energía, sino que la consume. O compramos durante horas porque no queremos volver a casa. O las ambiciones profesionales se convierten en adicción al trabajo. A Marta se le fue de las manos la preocupación por el cuidado de la casa (o tal vez por tratar de impresionar a sus invitados).

Si este tipo de comportamiento continúa, corremos el riesgo de llegar al final de nuestras vidas y preguntarnos: ¿Por qué desperdicié esta vida en cosas que no importan? Desearía tener más tiempo.

Se ha dicho que "los dos días más importantes de tu vida son el día en que naces y el día en que descubres el porqué de ello". Me gusta añadir una tercera: el día en que te deshaces de las distracciones que te impiden hacerlo. Así que déjame preguntarte, ¿estás listo para lidiar con tus distracciones y desechar todas las búsquedas menores? ¿Qué es lo que te detiene?