En Medio de las LlamasMuestra

Dios permite que suframos

Como comenté al inicio de este plan, ser seguidores de Jesús no es una especie de comodín o pase que nos excluye de sufrir por pruebas. Uno de mis libros favoritos en la Biblia es el de Job. En serio me encanta porque los 42 capítulos del libro narran la historia de un hombre justo ante los ojos de Dios que perdió todo lo que tenía. Y si nos adentramos en la historia vemos que fue Dios mismo quien le permitió a Satanás quitarle todo a Job para probar que el corazón de él estaba completamente rendido a Cristo. Uno de los puntos que más me bendice sobre esta historia es que cuando todo se le es quitado a Job, en vez de encontrar una actitud de queja o desprecio hacia Dios, él decide rendirle alabanza aún en medio del dolor; y precisamente eso es lo que quiero rescatar de la historia.

Muchas veces nos encontraremos en medio de situaciones frustrantes, tristes, sin una salida aparente y quizás muy deprimentes. Pero quiero invitarte a que la próxima vez que pases por un valle de sombra, decidas rendirle alabanza a Dios. No importa la profundidad de tu situación, Dios sigue siendo Dios; Él nunca deja de ser, Él nunca deja de estar y Él nunca deja de amar. Te animo a que de tu boca salgan alabanzas sobre la grandeza, poder y soberanía de Dios en lugar de queja, mal agradecimiento y odio.