Meditaciones Para El AyunoMuestra

Su Palabra

El ayuno consiste en abstenerse del alimento físico para empezar a alimentarse espiritualmente. La Palabra de Dios es el alimento espiritual que necesitamos ingerir y asimilar en nuestras vidas. No se trata de hacer dieta, no se trata de morirse de hambre. Se trata de buscar la Palabra que sale de la boca de Dios que sustenta la vida de los seres humanos.

Cuando nos alimentamos con la Palabra de Dios y la empezamos a asimilar experimentaremos un nuevo nivel de madurez. Ella forma parte de la alimentación de los que día a día se esfuerzan por agradarle a Dios y vivir según Su voluntad.

El tiempo de ayuno acompañado de la lectura y meditación bíblica resulta en un nuevo tiempo de revelación de las cosas que Dios tiene para cada uno de nosotros. Su Palabra nos ayuda a ordenar bien nuestras prioridades. ¿Qué es más importante? ¿El alimento físico o el alimento espiritual? Es verdad que el alimento físico sustenta la vida, pero el alimento espiritual nos ayuda a depender de Dios; a su vez, sustenta la salud física, la salud emocional y la salud espiritual.

La Palabra enviada por Dios tiene un propósito. Nos enseña lo que está mal en nuestras vidas. Nos guía por el camino correcto. Nos previene. Nos da entendimiento. Nos sana y libera. Su Palabra es capaz de limpiar nuestro camino. Nos aconseja. Si nos ponemos a meditar en ella de día y de noche debemos tener la certeza que prosperaremos en todo.

Oración:

Espíritu Santo, Tú inspiraste cada una de las palabras escritas en la Biblia. Hoy tomo la decisión de meditar en ellas; te pido que me des la capacidad de entender lo que antes no entendía. Abre mis ojos a las maravillas que Tu Palabra contiene. Enciende en mi corazón un fuego que queme hasta los huesos cuando medite en Tu Palabra. Que Tu propósito se cumpla en mi vida.