Ya no persigas al vientoMuestra
Recuerda que habrá un ajuste de cuentas
Algún día estarás ante el Dios vivo. Nadie estará allí por ti; nadie estará en tu lugar. Ni tu madre, ni tu padre, ni tu novio o novia, ni tu marido o mujer; nadie te sustituirá. Solo tú y Dios. Todo lo que hayas hecho (tanto lo bueno como lo malo) será juzgado.
Los directivos que se preparan para contratar a menudo miran las páginas de las redes sociales de un candidato: Facebook, Instagram, Twitter, puede que incluso TikTok. Lo que alguien dice en las redes sociales muestra mucho sobre quién es, su educación, su familia, etc. Si un posible empleador echa un vistazo a las publicaciones en las redes sociales de un candidato a un puesto de trabajo, este podría arrepentirse de algunas de ellas. Pero, ¿cómo te sientes sabiendo que cada una de tus publicaciones, todo lo que hagas o digas, será revisado por Dios mismo?
Si no eres salvo, comparecerás en el juicio del gran trono blanco. Es para los que están muertos sin Cristo. Se les dirá por qué son arrojados al lago de fuego, lejos de la presencia de Dios (Apocalipsis 20:15). Será a causa de su propio pecado y porque han rechazado a Jesucristo.
Si eres salvo, también comparecerás ante el tribunal de Cristo. Para los que conocemos a Jesús, que le hemos entregado nuestra vida, no hay condenación (Romanos 8:1). Rendiremos cuentas por todo lo que hemos hecho, y nuestro Señor y Salvador considerará cómo recompensará nuestra obra. Recibiremos la vida eterna y mucho más de lo que jamás podríamos imaginar (1 Corintios 2:9), si velamos por nuestras vidas y permanecemos fieles (2 Juan 1:8-9).
Nadie escapa al juicio de Cristo. Habrá un juicio final para todos nosotros. Cada persona del planeta Tierra, en todos los tiempos, tendrá que rendir cuentas ante Dios, porque Él es misericordioso y justo.
Por tanto, vive con la eternidad en tu mente y en tu corazón. Para ello, comprende el sistema. Declara tu devoción a Dios. Ora para tener perspectiva. Adopta una postura de peregrino. Mira lo invisible. Y recuerda que habrá un ajuste de cuentas.
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Acerca de este Plan
Salomón, el hombre más sabio y rico de la Tierra, descubrió muy tarde, que había malgastado su vida persiguiendo el viento. En un mundo sujeto a lo temporal y destinado a consumirse, los creyentes deben mantener su enfoque en lo que es eterno. Este plan devocional proporciona a los creyentes seis pasos para mantener un enfoque eterno, de modo que puedan marcar la diferencia para Cristo.
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Queremos dar las gracias a la Universidad Oral Roberts (ORU), en colaboración con El Centro Network, por facilitarnos este plan devocional. Para más información, visita: https://www.oru.edu/ y https://elcentronetwork.com