Contagio espiritual (1) JuniasMuestra

Una apóstol mujer

Cuando hablamos de Junias, no estamos tratando de una simple sierva, sino de una apóstol mujer. Es por eso que la pregunta no debería ser cómo puede una mujer ser considerada una apóstol, sino qué hizo Junías para llegar para ser destacada entre los apóstoles, ¿no es así?

Es cierto que la figura de los apóstoles estaba reservada para los 12 discípulos de Jesús. Hablando más en detalle, Matías ocupó el lugar de Judas Iscariote para completar el grupo, y Pablo entró al mismo como una excepción a la regla. De ahí explica el porqué algunos cristianos de Asia Menor rechazaban a Pablo como el apóstol a los gentiles.

Pero también es verdad que hubo un grupo de apóstoles algo más extenso. Hechos 14:14 dice: “Al enterarse de esto los apóstoles Bernabé y Pablo”, es decir, Bernabé no pertenecía al grupo de los 12, sin embargo, era considerado un apóstol. Además, el capítulo 15 de 1 Corintios es suficiente para entender que el grupo de apóstoles comprendía un círculo más amplio, pues dice: “apareció a Cefas, y luego a los doce… Luego se apareció a Jacobo, más tarde a todos los apóstoles, y, por último, como a uno nacido fuera de tiempo, se me apareció también a mí” (1 Corintios 15:5, 7-8). Nuevamente, da a entender la presencia de más apóstoles que estaban por fuera de los 12.

Orígenes aceptaba la idea de que Junias fuera una apóstol mujer. En la misma línea Juan Crisóstomo escribió:

“¡Ser un apóstol es algo grandioso! ¡Pero ser destacado entre los apóstoles, solo piensen en qué alabanza más maravillosa es eso! Ellos estaban destacándose debido a sus obras y virtuosas acciones. De hecho, cuán grande debe haber sido la sabiduría de esta mujer para ser considerada digna del título de apóstol”.

Junias fue pariente de Pablo, compañera de cárcel junto a Andrónico, convertida a Cristo antes que el apóstol, pero sobre todas las cosas, fue una destacada entre los apóstoles, una apóstol mujer. Gloria a Dios por las Junias alrededor del mundo que sirven a Dios, que están produciendo un terremoto espiritual por su servicio, y están contagiando su pasión por Jesús.