La vida de Elías, un luchadorEjemplo

No somos superhéroes

¡Cuánto nos atrapan las sagas de Star Wars, DC o Marvel! Los superhéroes pueden levantar grandes pesos, volar, saltar lejos, ver a largas distancias, escuchar los más agudos sonidos. ¿Cuál es tu favorito? En mi niñez me encantaban Superman y Batman. Luego crecí y me atraparon los Jedis ¡Cuánta habilidad para traer la paz a la galaxia! Si pensamos en relación a Las Escrituras, podemos ver a algunos personajes bíblicos como grandes superhéroes. Elías es un ejemplo a seguir, es un héroe para mí. ¡Cómo se dejó usar por Dios! Los carros de fuego. Su rol para denunciar el pecado. Su humildad para gestar a su sucesor. Elías fue usado por Dios para que caiga fuego del cielo en el Monte Carmelo. Sin embargo, aunque lo parezca, Elías no fue un superhéroe. Los superhéroes existen en nuestra imaginación y en las películas (que por cierto me encanta verlas). En la vida terrenal, no.

Elías era un hombre con debilidades como las nuestras. Cuando Elías fue amenazado por Jezabel, tuvo miedo y se escapó al desierto. Cansado, se sentó en un arbusto con ganas de morirse.

Así como Elías no fue un superhéroe, nosotros tampoco. Tenemos que reconocerlo: ¡No somos perfectos! Somos personas con fortalezas y debilidades. Dios no quiere convertirnos en superhéroes para usarnos, Él quiere glorificarse en nuestra debilidad.

Oración. Señor, reconozco que soy débil. No soy perfecto. Quiero aprender de Elías. Necesito de tu ayuda cada día y a cada minuto. No podré sólo. Gracias Señor por ser mi sostén. Amén.