Esperanza es diferente a fe

Debes saber que la esperanza no es lo mismo que la fe. Porque la fe te da la certeza de que ya tienes tu milagro. Por otro lado, la esperanza, es aquella que, en medio de tiempos de tribulación y oscuridad, te da una pequeña ilusión interna, que, aunque no sabes cómo, ni cuando, Dios hará algo.

Veamos el caso de Pablo, quien fue enviado por el Espíritu Santo a la misión, y sale a predicar al mundo gentil, él quería entrar a predicar a Asia, pero el Señor se lo prohibió, pues era el tiempo para Macedonia. El Señor se le aparece en sueños, y le dice que vaya, así que al llegar a Filipos, predica a unas mujeres, las cuales se convirtieron y bautizaron.

Pablo todos los días iba y les enseñaba, pero había una mujer que cada que pasaban empezaba a dar voces, pues tenía un espíritu de adivinación. Pablo, molesto por esto, reprendió el espíritu inmundo y salió de la mujer. Cuando sus amos vieron esto, se enojaron mucho, pues no podía seguir sacando provecho de la mujer, y a causa de esto, llevaron a Pablo y a Silas delante de los magistrados, rompiéndoles los vestidos y azotándolos con varas, para luego, ser llevados a prisión y puestos en la última celda, atados con grillos de manos y pies.

Pablo y Silas estaban en un lugar pagano, no tenían a quién acudir o pedir ayuda. Pero tenían esa pequeña ilusión en sus corazones. A media noche comenzaron a cantar alabanzas a Dios, y de repente vino un gran terremoto que sacudió los cimientos de la cárcel y todas las puertas fueron abiertas y las cadenas se soltaron. Aun así, no escaparon, sino que predicaron al carcelero, quien esa misma noche creyó y fue bautizado con toda su familia, y al día siguiente fueron puestos en libertad.

Eso se llama: Esperanza. No es fingir que no hay problemas, sino tener la confianza de que, aunque no sabes cómo ni cuándo... ¡Dios va a hacer algo!