Y Era BuenoMuestra

Hace miles de años, alguien estaba orando por ti. Así es, alguien en los días más antiguos oraba y pensaba en ti.

La Biblia nos dice que en sus últimos días, Jesús se detuvo y oró por aquellos que confiarían en Él. ¿No es genial? A veces, puede parecer que estamos pasando por cosas solos. Ya sea que estemos librando nuestras propias batallas o librando una en nombre de otra persona, parece que lo hacemos solos. El relato de Juan sobre la oración de Jesús nos muestra a ti y a mí que, incluso antes de que naciéramos, Jesús mismo estaba orando por nosotros. Esto significa que no importa qué batallas podamos enfrentar, ¡Él ya nos ha precedido! ¡No estamos en esto solos!

¡Hoy, dedica tiempo a darle las gracias a Jesús por estar siempre contigo!