Una verdadera amistadEjemplo

El privilegio de ser amigo de Dios

Abraham era un hombre como cualquier otro de su época, pero había algo en él que le llamó la atención a Dios. Abraham era un hombre bien acomodado, poseía muchos bienes materiales. Un día, Dios le hace una propuesta y lo invita a salir de su círculo familiar y su zona de confort. Dios le lanza una invitación media extraña, le dice que salga de su tierra y se marche a una tierra que le va a dar como herencia a él y a su descendencia; lo cual Abraham no lo piensa dos veces y se lanza a la aventura que Dios le ha propuesto. Pero, hagamos un alto en esta historia y hagámonos la siguiente pregunta: ¿Cuál descendencia? Ya que Abraham no tenía hijos y tanto él como su esposa Saray eran de edad avanzada. La respuesta a esa pregunta la vamos a encontrar en la misma vida de Abraham, ya que este no le puso "peros" a las propuestas que Dios le hizo. Abraham le obedeció casi en todo a Dios; salió de su tierra, se fue a un lugar desconocido, anduvo como peregrino y tuvo que afrontar peligros en las tierras que visitó. Abraham le tuvo fe a Dios y le fue obediente, esto llevaría más tarde a que Abraham tuviera una gran descendencia y que el Dios Todopoderoso le llamara Su amigo. Ser llamado amigo de Dios es todo un privilegio, ya que no es cualquiera quien ostenta tal título. Hoy día, cada uno de nosotros tenemos el privilegio de ser llamados hijos de Dios, y eso nos debería de llenar el corazón de mucho orgullo.

ORACIÓN

Dios Todopoderoso, hoy día te pido que me des un corazón humilde, un oído atento a tu Palabra y un espíritu lleno de fe para poder hacer frente a los retos que tú quieres para mi vida. Por favor, quita todo temor y duda que pueda albergar mi corazón y que, en todo tiempo, mi confianza y fe estén puestas solo en ti, mi amado Dios. Amén.