Siendo probados por DiosMuestra

El autor de la carta a los hebreos nos dice algo impresionante acerca de Abraham. “Pensando que Dios es poderoso para levantar aún de entre los muertos". ¿Cuándo vio Abraham a una persona siendo resucitada de entre los muertos? Es que no hubo ninguna referencia anterior a este acontecimiento a la que Abraham se pudiera agarrar para poder creer en una resurrección de muertos.

Y es que Abraham tenía más fe en el Dios que da la promesa, que en las promesas que da Dios. Nuestra fe no tiene que estar depositada en la promesa, sino en el Dios que da la promesa, y Abraham sabía, por su relación con Dios, que todo no iba a terminar con el sacrificio de su hijo Isaac, sino que aquella prueba Dios la estaba permitiendo por algo. Si se llevaba a cabo la ejecución de Isaac, el Señor se lo podría levantar de entre los muertos. ¿Cómo manifestó en Génesis esta fe? En el versículo 5 dice: “Iremos hasta allí y adoraremos, y volveremos a vosotros”. ¿Cómo que volveremos? No vas a volver con Isaac porque el Señor te ha dicho que lo mates, pero ahora sabemos por qué ha dicho "volveremos"; porque su fe no solamente era una fe que le ayudaba a caminar 3 días desde Beerseba, sino que su fe iba mucho más allá de lo que se podía comprobar y ver, él creía que su Dios no iba a terminar aquello en una tragedia, sino que Dios le podría resucitar de entre los muertos. ¿Hasta qué punto estamos dispuestos a obedecer a Dios? ¿Cuál es nuestro límite? ¿La primera prueba, la primera lágrima, el primer desengaño? ¿Hasta qué punto nos dejaremos usar por el Señor en este mundo llamado pruebas? Que Dios las envía para nuestro beneficio, para nuestro crecimiento, para nuestro desarrollo espiritual. Y a través de ellas vemos primero la fidelidad de nuestro Dios y después puedo demostrarle cuánto le amo y cuánto deseo cumplir su voluntad.