Aquí Estoy, Señor: Devociones del Ministerio Tiempo de GraciaMuestra
Me encanta adorarte, Señor
Me encanta estar en tu casa, Señor. Sé que te puedo adorar en todas partes, y lo hago; pero no hay nada como estar en tu casa con otros creyentes. Me gustan mucho los coros y los instrumentos, me encantan los himnos y las oraciones; aprecio los mensajes que vienen de tu Palabra, y me agrada dar mis ofrendas, reconociendo que tú eres el dador de todas las cosas.
Me alegra estar con otras personas que se interesan en ti tanto como yo. “Alabad a Jah, porque es bueno cantar salmos a nuestro Dios, porque suave y hermosa es la alabanza” (Salmo 147:1). Me alegra mucho ser capaz de hacer públicas mis alabanzas y que el mundo sepa que yo estoy orgulloso de ser hijo tuyo. Yo te afirmo; gracias porque tu me afirmas a mí.
Padre, tú eres el Diseñador y Creador de todo cuanto existe. Señor Jesús, tú eres nuestro Redentor, que viviste, moriste y resucitaste para recuperar a tus hermanos y hermanas que se habían perdido. Espíritu Santo, tú eres la fuente de energía y la sabiduría en mi vida. Yo te reconozco, te aprecio, dependo de ti, te adoro y te alabo. El gozo que siento en tu casa me sostendrá hasta el día en que te pueda alabar cara a cara. También en el cielo voy a amarte y a adorarte.
Me encanta estar en tu casa, Señor. Sé que te puedo adorar en todas partes, y lo hago; pero no hay nada como estar en tu casa con otros creyentes. Me gustan mucho los coros y los instrumentos, me encantan los himnos y las oraciones; aprecio los mensajes que vienen de tu Palabra, y me agrada dar mis ofrendas, reconociendo que tú eres el dador de todas las cosas.
Me alegra estar con otras personas que se interesan en ti tanto como yo. “Alabad a Jah, porque es bueno cantar salmos a nuestro Dios, porque suave y hermosa es la alabanza” (Salmo 147:1). Me alegra mucho ser capaz de hacer públicas mis alabanzas y que el mundo sepa que yo estoy orgulloso de ser hijo tuyo. Yo te afirmo; gracias porque tu me afirmas a mí.
Padre, tú eres el Diseñador y Creador de todo cuanto existe. Señor Jesús, tú eres nuestro Redentor, que viviste, moriste y resucitaste para recuperar a tus hermanos y hermanas que se habían perdido. Espíritu Santo, tú eres la fuente de energía y la sabiduría en mi vida. Yo te reconozco, te aprecio, dependo de ti, te adoro y te alabo. El gozo que siento en tu casa me sostendrá hasta el día en que te pueda alabar cara a cara. También en el cielo voy a amarte y a adorarte.
Escrituras
Acerca de este Plan
Dios sabe que algunas veces nuestras lenguas y nuestros cerebros no tienen las palabras para expresarle a él lo que queremos, por eso él nos dio el bello libro de los Salmos para darnos esas palabras y pensamientos que necesitamos para hablarle a él. Estas devociones, una para cada día del mes, utilizan Salmos para ayudarle a expresar al Señor sus necesidades, pesares, y alegrías.
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Este plan fue creado por LifeChurch.tv.