La Coraza De JusticiaMuestra

La Coraza de la Justicia

por Rocky Fleming

DIA 5: Identificados con Cristo

"Cristo en el corazón de todo hombre que piensa en mí, Cristo en la boca de todo el que habla de mí, Cristo en todo ojo que me ve, Cristo en todo oído que me oye." San Patricio

A medida que continuamos nuestra mirada a la "Coraza de Justicia" como la menciona Pablo en su carta a los Efesios, y los pensamientos de San Patricio al respecto, tratemos de entender cómo funciona esta parte defensiva de nuestro armamento espiritual. Comencemos con los elementos que lo componen. Al igual que con todos los chalecos antibalas, debe haber buenos materiales que intervengan en la forja de este armamento. Hemos estado discutiendo algunos de esos elementos que entran en esta armadura usando la versión de San Patricio. Los elementos de nuestra armadura son, de hecho, cómo estamos posicionados en nuestra fe en Cristo y cómo Él se convierte en nuestra Coraza de Justicia.

Patricio vio los elementos en su coraza como Su Declaración de Fe, Su Fortaleza Interna en Cristo, la seguridad que tenía de que estaba Envuelto en el Cuidado de Dios, Su perspectiva de que estaba Protegido por la Presencia de Dios, y Su abandono personal y su confianza absoluta en estar Identificado con Cristo. Miro estos elementos y entiendo que estas son las cosas (frutos) que se encuentran en la proximidad que se nos da cuando permanecemos en Jesús y Él en nosotros. Esto me dice que todos los elementos están disponibles para nosotros para nuestra armadura, pero debemos desempeñar un papel en la forja de esta armadura yendo a este lugar de morada. Esto requiere tiempo y compromiso de nuestra parte.

El proceso y la prioridad que le demos para entrar en una proximidad más cercana con Cristo forjará a un hombre que sigue a Cristo a semejanza de Cristo, y es esta imagen de Cristo la que se convierte en nuestra coraza de justicia. Esta imagen de Cristo que está delante de nosotros en nuestra vida hace que los demonios corran cuando la ven. Había un propósito en Pablo al usar la ilustración de la coraza. Era porque la coraza, en su época, protegía el corazón y los órganos internos de un soldado. Hoy se requiere la misma necesidad de proteger nuestros corazones. Sin embargo, no estamos hablando de la bomba orgánica. Estamos hablando de nuestro hombre interior. Así que hablemos del corazón, como se menciona en la Biblia:

El Corazón es donde se forma el carácter semejante al de Cristo. Los tesoros que allí se encuentran tienen un valor inconmensurable. Por eso hay que protegerlo.

El Corazón es visto como la mente, las emociones, la voluntad, o, para resumir, es el hombre interior. Por esa razón, cuando el hombre interior está enfermo espiritualmente, el hombre exterior lo reflejará. No es de extrañar que leamos en Proverbios 4:23 que "sobre todo debemos guardar nuestro corazón". Si no lo protegemos, volverá a sus antiguos instintos y a su naturaleza y nuestra vida exterior tendrá el mismo aspecto.

El Corazón tiene una gran capacidad tanto para el bien como para el mal. En Jeremías 17:9 leemos que nuestro hombre interior natural (corazón) está desesperadamente enfermo. Por lo tanto, necesitamos un cambio de corazón. Dios promete darnos un corazón nuevo gracias a Cristo. La coraza de la justicia crea un corazón cambiado, y protege al corazón que es cambiado.

Podría seguir con muchas ilustraciones sobre la composición del corazón, su gran potencial y sus grandes vulnerabilidades, pero este breve devocional no lo permitirá. Permítanme resumirlo diciendo que necesitamos desesperadamente un cambio de corazón y un corazón protegido, y la Coraza de Justicia proveerá ambas cosas. Como una mirada final a los elementos en el pectoral de San Patricio, veo en sus palabras anteriores que estar claramente identificado con Cristo es esencial. Si no estamos claramente identificados con Él, estamos apoyando a medias Su misión a través de nuestra vida. Jesús dijo que no podíamos servir a dos señores. O estamos con Él de todo corazón o no estamos en absoluto. Si somos poco entusiastas, esto creará vulnerabilidad espiritual.

Una leyenda mítica habla de un poderoso guerrero llamado Aquiles. Se supone que estaba completamente protegido de todas las flechas y lanzas, excepto en los talones. Cuando su enemigo se enteró de esto, concentraron su ataque en ese lugar y lo derribaron. Sansón era un personaje bíblico que tenía una vulnerabilidad similar. Su vulnerabilidad era mantener su cabello sin cortar. Cuando su enemigo descubrió esto, atacaron ese lugar de su vida y lo derribaron. Nuestra coraza de justicia será una armadura impenetrable para nosotros, siempre que se forme de adentro hacia afuera con la relación permanente con Cristo que crea un corazón nuevo. Entonces este nuevo corazón debe hacer una identificación clara y absoluta con Jesús por nuestra fe en Sus palabras, Su poder, Su presencia y Su protección. Cuando hacemos esto, el área más vulnerable de nuestra vida, el corazón, está completamente protegida, y esto permite que Dios forme a los poderosos guerreros espirituales que Él está levantando para los tiempos en que vivimos hoy.