NuevoEjemplo

Escrito por Zoe, 21 años, de Denver, Colorado, EE. UU.

¿Cuán especial es que el mismo Dios que creó todo el universo te haya creado a ti? El mismo Dios que lo creó todo (todas las estrellas, montañas, playas, puestas de sol y cada copo de nieve único) pensó que el mundo necesitaba uno de ti. ¡Y Dios no se detuvo allí! Dios sigue trabajando en ti y a través de ti cada día. Dios te ama tanto que la obra en tu vida nunca se detiene. ¡Nunca termina! Nunca te abandonarán, porque cuando Dios empieza un proyecto, lo sigue hasta el final. Dios tiene un plan especial para ti y solo para ti. Por eso, puedes tener paz sabiendo que Dios no te abandonará y que está contigo en cada paso del camino.

Tómate unos momentos para reflexionar sobre la fidelidad de Dios en tu vida. Piensa en un momento específico en el que Dios no se haya dado por vencido contigo. Si necesitas ayuda, acércate a un líder de confianza y pregúntale por un momento en el que supo que Dios no lo había abandonado. A medida que avanzas en tu día, recuerda que la obra de Dios en ti siempre está ocurriendo y continuará a lo largo de tu vida.