Confía, Dios te guiaráMuestra

"Dos pajaritos no valen más que una moneda. Sin embargo, ningún pajarito muere sin que Dios, el Padre de ustedes, lo permita. ¡Dios sabe hasta cuántos cabellos tienen ustedes en la cabeza! Por eso, no tengan miedo. Ustedes valen mucho más que todos los pajaritos" (Mateo 10:29-31, TLA).

Padre mío, gracias por recordarme día a día tu profundo amor por mí. Has abierto mis ojos a tus detalles tiernos, tu gracia infinita y tu favor inmerecido. El temor no me paraliza, lo puedo enfrentar con el coraje de saber que soy tu hija, que mi vida está escondida en Cristo; y, aunque la vida esté llena de incertidumbre, puedo confiar en tu cuidado, tu provisión y tu protección.

La vida está llena de momentos, tanto buenos como malos, pero todo va a pasar; nada es eterno excepto Tú y tus promesas. Cada reto, problema o dificultad, hoy es para mí una oportunidad más para verte obrar y revelarte a mí en tu gloria y tu poder.

Gracias por el poder de tu Espíritu en mi corazón y en mi mente. Solo Él puede darme la capacidad de ser coherente con mi fe. Es tan fácil decir que creo, pero la decisión de creer muchas veces no es tan fácil para mí cuando dejo que mi mente valide mis temores y quedo presa de las dudas, mas es Tu Palabra y el poder de Tu Espíritu quien infunde en mí nuevas fuerzas y me da aliento para perseverar en creer y vencer mis temores.

Padre, gracias porque jamás mis luchas te toman por sorpresa. Tú me ves y te ocupas de cada detalle de mi vida. Hoy, puedo enfrentar este día, no desde mis incapacidades y limitaciones, sino desde mi fe en Cristo, quien no solo venció el poder del pecado para matarme, sino que en la Cruz llevó mi enfermedad, mi maldición y mi escasez para que, junto a Él, toda mi necesidad encuentre provisión.

En el precioso nombre de Jesús, amén.