El NiñoMuestra

Escrito por Andrea, 17 años, Rochester Hills, MI, EE. UU.

¿Estarías dispuesto a recibir un castigo por alguien que cometió un crimen? Si somos honestos, la mayoría de nosotros diría inmediatamente: «¡Claro que no!». Bueno, Jesús, el perfecto Hijo de Dios, hizo algo que todos consideran loco e irracional. Como seres humanos, necesitábamos ayuda. Necesitábamos una manera de estar cerca de Dios nuevamente. Y como Dios también quería eso, envió a Jesús al mundo en aquella primera Navidad. Aunque durante este tiempo celebramos su nacimiento, fue su muerte y resurrección lo que al final hizo posible que nos acercáramos nuevamente a Dios. Jesús murió voluntariamente por nosotros. En la cruz, él cargó sobres sus hombros con nuestro pecado pasado, presente y futuro. Y lo hizo con el corazón lleno de amor por nosotros. Tanto es su amor que se desborda y cae sobre todo el que lo acepte.

Esta semana, dale gracias a Dios por el regalo que es Jesús. Aunque quizá conozcas muy bien este versículo, tómate un tiempo para reflexionar en su verdad eterna y lo que significa para tu vida hoy en día.