¡La comparación no es un juego!Muestra

Reemplaza la queja por gratitud

¡Pongamos atención y cuidado a nuestros pensamientos! Eso en lo que pensamos constantemente, lo que dejamos entrar a nuestra mente y corazón, es lo que va a determinar la manera de vivir nuestros días.

Si lo que constantemente pensamos es en lo mucho que nos falta, no vamos a poder ver y disfrutar lo mucho que tenemos, y lo empezaremos a dar por sentado. Todo es una bendición hasta que se vuelve costumbre.

¡Si hoy tenemos sustento y abrigo, hoy tenemos mucho que agradecer!

Cambiemos nuestra visión y al contrario de ver lo que no tenemos o lo que nos falta, agradezcamos a Dios todo lo que día a día, de diferentes formas, nos bendice.

¿Has agradecido últimamente por las bendiciones de Dios a tu vida?