Fidelidad: Leyendo Con El Pueblo De DiosMuestra

Desafío de Memorización:
Este mes, mientras seguimos nuestras lecturas diarias, nos enfocaremos en memorizar una porción del último encargo de Samuel al pueblo de Dios en 1 Samuel 12:13-15 y 24-25. Estos versículos subrayan el tema perdurable de la fidelidad al Señor, un principio tan vital para el liderazgo hoy como lo era en el tiempo de Samuel.

Cada semana nos concentraremos en un versículo nuevo, con el objetivo de memorizar todos los versículos para el final del mes. Al meditar en estas palabras desafiantes y atemporales, que Dios inspire y rete a ti y a tu comunidad de fe, tal como lo hizo con Israel a través del mensaje de Samuel.

13 Ahora, pues, he aquí el rey que habéis elegido, el que vosotros pedisteis; he aquí que el Señor ha puesto sobre vosotros un rey. - 1 Samuel 12:13

Cada día, este plan incluirá una breve "introducción" para guiar tu reflexión sobre las lecturas del día. Estas "introducciones" destacan el tema de la fidelidad de Dios tanto en los pasajes del Antiguo como del Nuevo Testamento, mientras que el Salmo final nos servirá como una respuesta orante a las lecturas.

Introducción al libro de Rut:

La historia de Rut realmente comienza con la misión de Josué, quien envió a dos espías a Jericó. Durante esa misión, se encuentran con una mujer llamada Rahab, que era una mujer de la noche. Rahab se convirtió en una heroína conocida entre los israelitas, un ejemplo de fe que produce acción y un modelo de la exhortación dada a Josué y al pueblo de Israel: "Sé fuerte y valiente" (Josué 1:6). Por la gracia de Dios, Rahab creyó, mientras que todos los habitantes de la ciudad de Jericó permanecían como enemigos de Dios y Su pueblo.

Los hebreos estaban restringidos a casarse solo con personas del pueblo elegido, los israelitas. Sin embargo, un joven llamado Salmón, miembro de la tribu de Judá, se enamoró de Rahab y obtuvo permiso para casarse con esta heroína que había demostrado una fe ejemplar y que ahora vivía fuera del campamento del pueblo de Israel con su familia.

En la tierra prometida, ahora conocida como Israel, Salmón y Rahab tuvieron un hijo, a quien llamaron Booz. Booz era conocido como un "hombre de bien", lo que significa que tenía una excelente reputación, tierras y riquezas. Sus familiares viudos, Noemí y su nuera moabita Rut, se acercaron a Booz en busca de ayuda. Según la ley mosaica, Booz estaba legalmente obligado a ayudar a Noemí, y más tarde, se enamoró de Rut y se casó con ella. Al igual que Rahab, Rut no nació en la fe de los hebreos, pero después experimentó a Dios y respondió a Él con fe y compromiso.

La historia de Booz y Rut se desarrolla durante el tiempo de los jueces en Israel. Ellos tuvieron un hijo llamado Obed, quien prosperó y se casó, teniendo a su vez un hijo llamado Isaí. Isaí tuvo ocho hijos, y Dios eligió al menor de ellos, David, para ser el segundo rey de Israel. Esto es sumamente significativo, ya que más adelante se profetizaría que el Salvador sería descendiente de la línea de David (2 Samuel 7:12-13; Salmo 132:11; Jeremías 23:5-6). Las genealogías de Jesús en Mateo y Lucas, encontradas en el Nuevo Testamento, confirman esta verdad.

"Es importante destacar no solo que las profecías sobre la relación de Jesús con David son verdaderas, sino también que esto revela algo más que Dios había anunciado a través de Sus profetas. Dios había dicho que no solo los israelitas formarían parte de Su reino, sino que también incluiría a los gentiles, aquellos que no eran descendientes de Abraham (Isaías 42:6-7; Oseas 2:23). Así como Él introdujo a Abraham, por gracia y fe, también introdujo a estas dos mujeres gentiles. Rahab y Rut son ejemplos sorprendentes de cómo Dios alcanza a un mundo hostil, y trae a los improbables, a aquellos que antes eran Sus enemigos, para que experimenten Su gracia salvadora. Ambas mujeres se convirtieron en mujeres de fe, acción y valentía, y ambas son parte de la genealogía de Jesús, quien ahora tiene gentiles en su ascendencia." - Jinet Troost