La Fidelidad De Dios - Guiándonos De Vuelta a ÉlEjemplo

Dios da esperanza

Juicio y esperanza

Leer: Miqueas 1:1-9; 2:3-13

EOAO: Miqueas 2:12-13

“Voy a reunirte, Jacob, todo entero, recogeré ciertamente al resto de Israel;
lo reuniré como ovejas de Bosra, como un rebaño en medio de su aprisco,
y harán el estruendo de una multitud. Subirá el que abre caminos delante de ellos;
abrirán camino, pasarán la puerta y saldrán por ella".

En el texto

El libro de Miqueas combina advertencias de juicio con mensajes de esperanza. Si bien es fácil centrarse en la esperanza, debemos entenderla a la luz del juicio. Miqueas advierte a Israel y a Judá sobre las invasiones de Asiria y Babilonia, enviadas como juicio por sus pecados. Sus líderes actuaron con codicia, violando las leyes de Dios al explotar a los pobres y vulnerables.

Observa lo que dice el pueblo cuando se le advierte de este juicio. Dicen que la paciencia de Dios nunca se acabará, que Él nunca enviaría al pueblo al exilio (Miqueas 2:7). Aunque el pueblo tiene razón en que Dios es paciente, no entienden la santidad de Dios. Dios no puede dejar que el pecado quede impune. No sería justo si lo hiciera.

Aunque el juicio prometido puede ser duro de leer, también es merecido. El pueblo quería seguir sus propios caminos en lugar de los caminos de Dios, por lo que Él los estaba entregando a lo que ellos querían. Esto terminaría mal para el pueblo de Israel y Judá. Al comprender el juicio prometido, podemos apreciar mejor el mensaje de esperanza.

Dios también es misericordioso y clemente. Prometió preservar al remanente fiel. El final del capítulo 2 describe a Dios como el pastor del pueblo. Él reunirá a su pueblo y será su verdadero rey. ¡Qué asombroso! Dios no tenía que hacer esa promesa, pero eligió hacerlo.

Cuando entendemos quién es Dios en realidad, podemos adorarlo como debemos. Tenemos que entender tanto la justicia divina de Dios como su misericordia y gracia. Es a la luz de estas características que podemos ser perdonados y libres a través de la cruz de Jesucristo. ¡Qué Dios tan increíble servimos!

Oración

Dios, gracias porque eres santo, misericordioso y no tratas a los que creemos en ti como merece nuestro pecado. Ayúdame a vivir con una correcta comprensión de tu carácter. Que me lleve a adorarte en verdad. Amén.