ISAÍAS 35:3-7
ISAÍAS 35:3-7 BLP
Fortaleced las manos débiles, asegurad las rodillas vacilantes; decid a los alocados: «Seguid firmes, no temáis, que viene vuestro Dios a vengaros, él os trae la recompensa y viene en persona a salvaros». Entonces se abrirán los ojos de los ciegos, los oídos de los sordos se destaparán. Entonces saltará el cojo como el ciervo, la lengua del mudo cantará. Pues manarán aguas en la estepa, habrá torrenteras en el desierto; el páramo se convertirá en estanque, el sequedal en lugar de manantiales. La guarida donde sesteaban los chacales será lugar de cañas y de juncos.